Recibimiento de trabajos en formato de artículos científicos, ensayos, textos literarios e imágenes que reflexionen sobre la temática, con plazo prorrogado hasta el día 30 de noviembre de 2022.

 Vivimos en una época en la que las estructuras jerárquicas de poder político nos atraviesan constantemente. En particular, estamos sometidos a una paradoja teórica y material que se concreta en forma de "democracia representativa", asumida como el paradigma institucional máximo de realización política, pero que no es más que un sistema elegido deliberadamente con el objetivo de "excluir" del poder a aquellos que no cumplen con sus condiciones de uso y acceso. En este contexto, es innegable que los métodos tradicionales de control y/o resistencia al poder político estratificado ya no son suficientes para alterar el status quo o para provocar cambios concretos y efectivos en respuesta a las demandas de la sociedad.

Contra ese poder político estratificado, surge en las calles la desobediencia política gestada por los gestos comunes de personas ordinarias. En las plazas donde los cuerpos desobedientes se aglutinan en la formación del espacio político, los afectos del combate anuncian la posibilidad de un nuevo futuro, uno innegablemente no utópico al que solo los locos pueden anticiparse, presente entre la tendencia constitutiva y el límite determinado.

 

La desobediencia política es el dispositivo subversivo que desactiva lo que está establecido y determinado. Rompe con lo constituido, con las estructuras árquicas e nômicas que separan, dividen y excluyen. Siendo ella misma vulgar, está al alcance de cualquiera, bastando con abandonar la aquiescencia para usarla. Interrumpir el tiempo de producción, ocupar espacios intocables, decir no al mandato que se impone desde arriba: estos son los gestos desobedientes que subvierten el orden jerárquico y divisorio bajo la potencia creativa del caos, de la no saber y del lanzar los dados que es la apuesta democrática, pues la desobediencia política es aquella que desnuda al rey.

La desobediencia política es la potencia constituyente del presente y la praxis democrática que excede los límites geográficos y desimaginativos del Estado-capital, haciéndose, deshaciéndose y rehaciéndose como una zona autónoma temporal en medio de las certezas antidemocráticas de la democracia liberal. Hace de su fin su comienzo y en su comienzo está precisamente su fin, ya que nunca se reduce a la permanencia: la desobediencia política es movimiento. Como enseñó Elliot hace mucho tiempo: "Lo que podría haber sido es una abstracción que permanece, una posibilidad perpetua en un mundo solo de especulación. Lo que podría haber sido y lo que fue convergen en un solo fin, que siempre está presente". La desobediencia política es, así, la revolución inmanente del tiempo actual.

 

En este escenario, la convocatoria de (Des)troços busca encontrar trabajos que provoquen rupturas y fisuras a partir de la apuesta por una propuesta democrática que se niegue a aquiescer y consentir con las estructuras jerárquicas de poder y que tenga en perspectiva la realización política a través del éxodo y el abandono de lo constituido.

Destacamos además que, más allá de este dossier temático, la revista (Des)troços recibe trabajos en flujo continuo de carácter general que se relacionen con el pensamiento radical y la línea editorial de la publicación, como se describe en: https://periodicos.ufmg.br/index.php/revistadestrocos/about. Las contribuciones deben ser enviadas a través del sistema OJS, respetando las reglas de envío en el caso de textos (https://periodicos.ufmg.br/index.php/revistadestrocos/about/submissions) hasta el 30 de noviembre de 2022. Los requisitos de titulación no se aplican a las autoras de imágenes, cuyas contribuciones serán evaluadas únicamente por el comité editorial. Las contribuciones en forma de textos serán evaluadas por el comité editorial y por el sistema de revisión por pares (double blind review). Una vez aprobados, los textos e imágenes se publicarán en el quinto número de la revista, previsto para ser lanzado en diciembre de 2022.